Marcasur conversó con Joana de Mattos Siqueira, integrante de la fundación, sobre el nuevo rumbo que tomó a partir de 2021, los objetivos enfocados en las minorías, la recaudación de fondos en el Annual Meeting y el histórico primer paso alcanzado con una universidad brasileña.
La INTA Foundation es una organización benéfica que trabaja para ampliar las oportunidades educativas y de desarrollo profesional en propiedad intelectual para poblaciones diversas y minorías en todo el mundo. En 2021 la fundación fue revitalizada con un propósito renovado y más enfocado en la diversidad y la inclusión, ampliando su objetivo original más relacionado a la responsabilidad social empresarial.
Días atrás la fundación anunció su subvención inaugural, con la cual financiará un programa de PI en la Facultad de Derecho de la Universidad Federal de Rio de Janeiro. La UFRJ, creada hace más de un siglo, es una de las mayores universidades brasileñas y su escuela de derecho es una de las tres mejores del país, con una matrícula de más de 3.000 estudiantes.
“Este programa de propiedad intelectual permitirá que nuestros estudiantes se beneficien de un área del derecho que ofrece oportunidades intelectuales y creativas con un plan de estudios y una pasantía cuidadosamente seleccionadas”, afirmó el profesor José Roberto Xavier, coordinador del Programa de Posgrado de la Facultad de Derecho de la UFRJ.
En el marco del INTA Annual Meeting en Singapur, este miércoles 17 la fundación llevará adelante un brunch para promocionar el acuerdo con la UFRJ, dar a conocer su trabajo y recaudar fondos. De este y otros temas Marcasur habló con Joana de Mattos Siqueira, abogada brasileña integrante del board de la INTA Foundation.
¿Cómo surgió tu participación en la fundación de INTA?
La INTA Foundation existía desde hace años pero estaba un poco adormecida. Hace dos años me invitaron a mí y a otras personas claves de otros países de Europa, Asia y América Latina para que obtenga un carácter internacional, porque hasta ese momento los integrantes de la fundación y la fundación en sí era todos estadounidenses.
¿Cómo ha funcionado desde entonces?
Entrar fue una gran responsabilidad porque queríamos despertar a la fundación. Lo hicimos pero incluso hoy tenemos mucho camino para que la gente conozca y confíe en la fundación. Porque todavía, pese a este carácter internacional que se le dio, muchos piensan que es algo muy vinculado a la INTA y a Estados Unidos, y que no va a tener consecuencias en sus países. Confunden porque creen que la fundación es INTA en sí mismo, pero es algo más amplio. Entonces eligen apoyar fundaciones nacionales. Por eso es importante que la gente entienda el concepto internacional de la fundación y su seriedad. Cuando nosotros, los abogados de la PI, lo tengamos claro a esto, ahí creo que la INTA Foundation tomará aún más impulso y sentido.
¿Cuáles son los objetivos de la fundación?
Apoyar a las minorías, definitivamente. Busca la inclusión, diversidad y educación de propiedad intelectual en el mundo entero. El primer evento abierto para dar a conocer esta fundación renovada fue el año pasado en Washington DC, donde hicimos un brunch para presentar la fundación y luego en el Leadership Meeting de Miami hicimos otro brunch. Ahora haremos el tercero en Singapur este miércoles a las 11:30. La idea es tener estos eventos siempre en el Annual Meeting y el Leadership Meeting para dar a conocer nuestro trabajo.
¿De qué se tratará el brunch en Singapur?
Va a ser para presentar lo que estamos haciendo y también para recaudar fondos para la fundación. Siempre hacemos una auction y es impresionante como todos apoyan. Los in-houses, por ejemplo, el año pasado lo demostraron: tanto Meta como Amazon donaron experiencias donde las personas pagaban para estar un día en esas empresas y conocer el campus y cómo trabajan sus equipos legales. En Singapur tendremos nuevamente a Amazon y también a Netflix y NBC. FIFA nos ha a apoyado. Cada uno va apoyando de alguna manera. Además, por primera vez el brunch fue abierto para patrocinios, que creo es la plataforma donde nos apoyarán los despachos.
Recientemente la fundación realizó su primera subvención, con la Facultad de Derecho de la Universidad Federal de Rio de Janeiro. Cuéntanos de ese proceso.
En Brasil más del 50% de la población es negra y hay un gran porcentaje de esa población con un bajo nivel socioeconómico. Existe en el sistema de universidades del país algunos programas que dan la oportunidad a estudiantes de estos contextos de ser incluidos en el mundo legal, pero son programas de derecho general, no de PI. Nosotros decidimos entonces asociarnos con esta súper universidad, una de las mejores del país a nivel de derecho, para dar un curso para que los estudiantes de derecho aprendan sobre PI. Le propusimos en febrero de 2022 a la UFRJ e increíblemente tenían un proyecto similar estructurado, pero les faltaba el sustento económico. Era pleno carnaval en Brasil y sin embargo en la universidad pararon todos para trabajar en el programa y presentar a la INTA Foundation el borrador.
¿Por qué no existen en Brasil programas de PI para minorías?
En Brasil hay una idea de que la PI es algo para la elite, entonces la gran mayoría de los estudiantes de derecho no conoce la PI porque en definitiva la mayoría de las universidades no tienen PI. Si uno tiene interés en la PI puede elegir una materia selectiva, extra, pero no está la propiedad intelectual incluida en el currículo oficial de las carreras de derecho. Entonces esto determina que la mayoría de los estudiantes no tengan contacto con la PI y crean que es un mundo muy alejado, de viajes, inaccesible porque se debe aprender inglés. Es una mirada que se transforma en un obstáculo muy grande para despertar el interés e incluso el coraje de los estudiantes en seguir una carrera en propiedad intelectual. Pensando en todo eso decidimos este primer proyecto para la fundación.
¿Cómo es concreto el proyecto?
A la universidad le propusimos que la INTA Foundation iba a apoyar financieramente y ellos tienen que desarrollar el curso, que enseñará a los estudiantes sobre PI. El cupo es de 15 estudiantes que desde hace diez días tienen clases todos los sábados durante tres meses. Se enseña sobre la propiedad intelectual en forma exhaustiva: marcas, contratos, patentes, inclusos clases de inglés, que es necesario por la importancia del inglés cuando se trabaja con clientes internacionales. Cuando termine ese curso los estudiantes tendrán la oportunidad de estar en un despacho de PI en Río de Janeiro. Ya estuve hablando con un montón de colegas amigos y todos están en el mismo barco y abrieron las puertas de sus despachos para recibir a estos estudiantes. Y el mejor estudiante va a ganar un viaje a un evento de INTA para 2024. Es una súper oportunidad.
Como brasileña, ¿cuál es tu balance personal de este programa?
A mí me llama la atención la determinación y las ganas de los estudiantes, porque es todos los sábados y aquí no se trata de subirse a un auto y llegar en 15 minutos a la universidad, ni caminar de tu dormitorio en un campus de la universidad para ir a clase. Aquí se trata de estudiantes que para venir a la universidad tardan más de dos horas en tren o en bus desde sus hogares, alejados de la ciudad. Al final son estudiantes que dedicarán todo su día sábado para esto. Entonces rescato y admiro las ganas de los estudiantes de estar ahí.
¿Cuáles son los próximos proyectos de la fundación?
El programa de Río de Janeiro es el primero pero no el único en carpeta. Muchos colegas latinoamericanos que tomaron conocimiento de este trabajo ya se acercaron con interés de hacer algo para sus países. También estamos en conversaciones con una universidad en Europa y otra universidad en Singapur. Queremos que la INTA Foundation sea global, internacional, que salga de Estados Unidos, porque en definitiva la INTA es la International Trademark Association.
Source:
MarcaSur - See more | PDF Download